viernes, 31 de octubre de 2014

Un pequeño recuerdo a dos grandes

 

Para que yo me llame Ángel González,

para que mi ser pese sobre el suelo,

fue necesario un ancho espacio

y un largo tiempo:

hombres de todo mar y toda tierra,

fértiles vientres de mujer, y cuerpos

y más cuerpos, fundiéndose incesantes

en otro cuerpo nuevo.

Solsticios y equinoccios alumbraron

con su cambiante luz, su vario cielo,

el viaje milenario de mi carne

trepando por los siglos y los huesos.

De su pasaje lento y doloroso

de su huida hasta el fin, sobreviviendo

naufragios, aferrándose

al último suspiro de los muertos,

yo no soy más que el resultado, el fruto,

lo que queda, podrido, entre los restos;

esto que veis aquí,

tan solo esto:

un escombro tenaz, que se resiste

a su ruina, que lucha contra el viento,

que avanza por caminos que no llevan

a ningún sitio. El éxito

de todos los fracasos. La enloquecida

fuerza del desaliento...

Ángel González

"Áspero mundo"

 

“La situación exclusiva de las especie humana, el salto que nos separa, como más avanzados, de los demás animales es el uso del lenguaje articulado, la palabra...

La palabra añade a los humanos unos recursos y capacidades, sin precedentes en los demás seres...

Sobre el mundo físico exterior la palabra intensificó la más compleja organización social, apuntalando el sentido de entidad definiendo grupos, creando jerarquías e instituciones, permitiendo el desarrollo de proyectos en común, con órdenes, leyes, instrucciones y medios análogos. Es un medio para promover acciones humanas, motivándolas con justificaciones, lemas, eslóganes, etc. Es instrumento de la política, la justicia y todas las actividades, constituyendo la materia esencial de la literatura y las artes expresivas conexas. Y, por supuesto, sin ella no puede ni concebirse el desarrollo científico, ni el de los medios educativos. Su poder llega incluso al de crear en los sujetos deseos y hasta necesidades nuevas, para conveniencia de quienes lo provoquen.

Con eso entramos en el papel definitivo y casi exclusivo de la palabra para construir nuestro mundo mental; el imaginario colectivo y el individual... En resumen, en la esfera mental la palabra permite interpretaciones diversas del mundo real.

...el lenguaje, siendo esas alas, también es cárcel pues condiciona nuestro pensamiento y encarrila fácilmente nuestro entendimiento, descarrilándolo también. El lenguaje con frecuencia es una trampa; se usa para engañar y persuadir con falsedades o encadenar con creencias... El caso es que la palabra... debe ser recibida con criterio crítico pues puede ser un bálsamo o un veneno.

Finalmente: no sólo hay que reivindicar siempre el derecho a la palabra, como máxima expresión de nuestra humanidad. Pero también -y a esto se falta muchas veces- hay que cumplir el deber de usarla en pro de la dignidad propia o ajena. Pues, como proclamó magistralmente Martin Luther King, hay una conducta más escandalosa que la de los malvados y es el silencio de los hombres “buenos” que callan y miran para otro lado sin protestar de las maldades.”

Jose Luis Sampedro

"Sala de espera (La palabra)"

Ed. Plaza & Janés. Barcelona (2014)


En un futuro probablemente lejano, si la humanidad no se autodestruye antes, desarrollaremos un tipo de células hipersensibles a la solidaridad y la empatía, que detectarán la presencia o ausencia de estas cualidades en sus dueños y reaccionarán en consecuencia: autodestruyendo a su hospedador en el segundo caso y protegiéndolo de los mecanismos de envejecimiento celular en el primero, para permitirle vivir 500 o 1000 años, por el bien de sus congéneres, del resto de criaturas vivientes y del planeta que nos sustenta.

Aunque estos dos monstruos se nos fueron, nos quedan sus palabras.

Gracias por existir,

gracias a la palabra,

gracias por sus palabras,

que suerte poder leerlos!!!

sábado, 6 de septiembre de 2014

PRESENTES E AUSENCIAS

Entre os regalos que lle fixo, só dúas veces se esforzou cun presente bonito: unha cando empezaban a sair e a outra cando xa a perdera. Era unha cuestión práctica, tiñan pouco diñeiro, estaban máis atentos a outras cousas, estaban de acordo nisto, tíñano falado. Máis ela procuraba o xeito de atopar eses pequenos regaliños que o sorprenderan gratamente. Non podía ser falta de interese por parte del á hora de facela feliz. Queríanse. Chegou a darlle pistas claras, que sorprendía ignoradas mentres rompía o papel de regalo. E, ao longo dese camiño, ela ignoraba todo o demais que non quería ver ...ata que xa non houbo nada.


O MEDO

Sentín a súa man no hombreiro e din un brinco.
Ola -dixo-. Volvínme e disparei.
Mentres caía preguntei: Quén es?
Son a morte. Viña a saudarte porque te recoñecín ...ti es o medo.

sábado, 5 de abril de 2014

Sociofobia

Si eres de esas personas que piensan que las redes sociales son la revolución del siglo XXI y que conseguirán lo que no parecemos dispuestas a hacer mediante el apoyo mutuo en el mundo real, César Rendueles te plantea, en Sociofobia [Ed. Capital Swing Libros S.L. Madrid (2013)], un dilema que, ante todo, escapa de simplificaciones, con gran sentido crítico y no menor dosis de conocimiento sobre los distintos temas que aborda, que te resultará cuando menos polémico.
...Claro que todo lo que escriben los Rendueles (padre e hijo) resulta siempre recomendable.

Sin ningún ánimo de resumir, ni siquiera de señalar lo más interesante del libro, puesto que sería un ejercicio inútil y hasta estúpido tratar de medirme en pocas líneas con el conocimiento y la densidad de razonamiento de César Rendueles, no me resisto a dejaros aquí algunos apuntes, advirtiendo que no dan una idea de la riqueza y complejidad del texto, sino que tienen sólo el objetivo de espolear vuestra curiosidad...

“El mercado libre ni ha existido nunca ni puede llegar a existir... es un proyecto fracasado y profundamente contradictorio. Por eso, en el capitalismo realmente existente, el estado interviene constantemente para evitar que el país del nunca jamás del libre mercado se desmorone... arrastrando consigo a las élites que se aprovechan de sus falsas promesas.”
(pag. 22)

“Los anticapitalistas entendieron que, en realidad, los grandes dramas de nuestra era -la desigualdad material y social, la inestabilidad económica, el racismo o el patriarcado- son cuestiones sencillas de resolver con unos pequeños ajustes: apenas un cambio en la propiedad de los medios de producción y algo de ilustración... Los revolucionarios apenas aspiraron a alimentar, educar y llevar la democracia radical a la totalidad de la población mundial. Algo aparentemente factible y deseable dado nuestro nivel de desarrollo tecnológico y político. Justamente eso el lo que hace que ese proyecto resulte tan estremecedor. Porque se puede plantear al revés: alimentar a la población mundial nos obliga a destruir el mundo tal y como lo conocemos.”
(pag. 31)

“Las propuestas políticas que confían en la aparición de nuevas formas de sociabilidad despiertan desasosiego incluso entre sus partidarios... No vemos claro por qué demonios vamos a dejar de ser individualistas, egoístas, desconfiados e insolidarios”
(pag. 33)

“El ciberutopismo actualiza una idea muy presente en los movimientos revolucionarios modernos: la superación de la tutela comunitaria tradicional y la aparición de una forma de relación social al mismo tiempo solidaria y respetuosa con el libre desarrollo individual... El milenarismo digital es una mala respuesta a una buena pregunta... al igual que muchas concepciones modernas de la sociedad postcapitalista.
El ciberfetichismo resulta tan atractivo porque concibe nuestro tiempo como el resultado de una ruptura incruenta y fructífera con el pasado. Desde esta perspectiva, somos los afortunados herederos de algunos cambios tecnológicos con importantes subproductos sociales y potencialmente políticos... Internet y el tecnoutopismo, más que una cortina de humo, son un bálsamo de irrealidad para una herencia histórica insoportable, en la que la consistencia de la realidad parecía violentamente excesiva... El mensaje que no queremos oír es que nuestras esperanzas ciberutópicas han nacido muertas.”
(pag. 121)

“Creo que el ciberutopismo es, en esencia, una forma de autoengaño. Nos impide entender que las principales limitaciones a la solidaridad y la fraternidad son la desigualdad y la mercantilización.”
(pag. 35)

“Toda esta efervescencia social digital es, en el fondo, suntuaria, decorativa. Es inútil para lo que debería servir la vida en común: cuidar los unos de los otros... creo que las sociedades completas e ilustradas disponen de las materias primas necesarias para afrontar la democratización, la igualdad, la libertad y la solidaridad... pero la ideología de la red es un obstáculo insalvable para ello.”
(pag. 36)

“En realidad, la idea de que la tecnología puede contribuir a fortalecer y ampliar los vínculos entre las personas es bastante exótica. La historia de los últimos tres o cuatro siglos -que en parte es la historia de algunos cambios tecnológicos de dimensiones sísmicas- está marcada por una progresiva fragilización de las relaciones sociales...”
(pag. 87)

“La mayor parte de las cooperativas laborales exitosas en el mundo analógico tiene un alto nivel de arraigo comunitario... El coste a pagar por la combinación de independencia y cooperación características de Internet es que no puede ser un polo de autogobierno en sentido fuerte...”
(pag. 106)

“...somos codependientes y cualquier concepción de la libertad personal como base de la ética tiene que ser coherente con esa realidad antropológica...”
(pag. 143)

“...Hay una gran cantidad de sociabilidad en internet, pero resulta inservible par los cuidados.
...Si alguna lección deberíamos haber aprendido del capitalismo es que la alienación y la insolidaridad son perfectamente congruentes con estándares altos de nivel de vida y de educación.”
(pag. 148)

“...Es como si la gente hubiera aceptado rebajar su percepción de la realidad social a la escala explicativa de los economistas, sociólogos y psicólogos. La sociabilidad digital es tan expansiva porque es una pura relación formal cuya corrección se establece antes de evaluar su contenido material. El secreto es que apenas tiene contenido...”
(pag. 153)

“El ciberfetichismo y la sociofobia son la fase final de aceptación de la heteronomía terminal moderna, cuando ya sin ira ni negación nos sometemos al mercado y tratamos de emular socialmente sus dispositivos básicos.
El mayor desafío al ciberfetichismo y la sociofobia no es el ludismo o el comunitarismo sino la concreción política... Los acuerdos colectivos dirigidos a incentivar el cuidado mutuo, la igualdad y el desarrollo de las capacidades humanas necesitan reivindicar la soberanía democrática sobre la heteronomía mercantil. Tampoco basta con definirlos en términos abstractos y ponerlos a funcionar... Exigen un compromiso pragmático constante con su corrección y mejora, como... un recurso de uso común.”
(pag. 158)

“Un principio anticapitalista irrenunciable es que ningún asunto público esté excluido en principio de los procesos de deliberación democrática. Implica una subversión del consenso dominante en las democracias liberales acerca de la sustracción del debate político de los procesos de acumulación capitalista, que se dan por garantizados...”
(pag. 169)

“Precisamente este libro se pregunta cómo siguen vivos algunos problemas de la modernidad relacionados con la emancipación y el vínculo social en nuestra época de pantallas digitales y megaslums, de redes sociales y pisos patera.”
(pag. 195)

Como ya habréis imaginado las contribuciones más interesantes y más densas no figuran en este esquema, precisamente porque son imposibles de resumir. De modo que ahora sólo os queda hacer una cosa: leer el libro.




viernes, 21 de marzo de 2014

CRÓNICA DUNHA CESTERÍA MOI VIVA

15 de marzo de 2014.
Tiñamos acordado quedar para facer unha estructura de cestería viva na miña finca, no Veral, ao lado de Lugo: Lola Tourón, experta cesteira, Xose, experimentado en todo tipo de construccións vivas e ecolóxicas, e máis eu, que iba de peón aprendiz.
Foi unha mágoa que outras persoas que estaban interesadas non puideran achegarse, porque disfrutamos dun día soleado e perfecto para divertirse coa cestería.
Empezamos polo acopio do material (vimbio e salgueiro) pero dimos cun pequeno atranco na viaxe de ida porque pinchamos a medio camiño e topamos cuns tornillos imposibles de afloxar e un grueiro histérico que non tiña ferramentas adecuadas e nos levou de excursión na grúa por medio Lugo mentres decidía sobre a marcha o seguinte paso que iba dar.
Finalmente cambiouse a roda e chegamos á finca un pouco máis tarde do previsto, pero emprendimos a labor con brío e con todo o saber de Lola, o que facilita moito a rapidez na execución.

Empezamos por facer unha zanxa coa forma lixeiramente acaracolada que queriamos darlle á construcción.
Por certo, non dixen que a idea é poñer dentro un bater seco, pero podería ter outros moitos usos.
Logo cun pau de ferro fixemos buratos, o máis fondos posible para plantar os vimbios, que tiñan unha altura aproximada duns 2 metros, e intercaladas, pequenas estacas de salgueiro, pensando en que tamén poidan prender.

A continuación, para asegurar a posición das varas cesteamos unha liña de tecido tamén con varas de vimbio na base da estructura.

Chegou o momento de atar as varas para ir dando forma á estructura.


Tamén no teito.

A continuación fomos introducindo máis varas entretecidas para reforzala.

E finalmente pódese empezar por cubrila con xesta.

O que vedes fixémolo entre tres persoas nunhas 4 horas ou pouco máis.
A que quedou xenial????
 
O traballo aínda non está rematado, así que si vos animades a probar, quedamos. É do máis divertido!

E agora toca regar cando non chova. Porque se trata de que as varas enraicen e que as paredes da estructura se vaian facendo máis frondosas.
Nos vindeiros anos haberá que coidala, podala, tecer as novas varas que vaian saindo...